Actividad sectorial de julio enciende alarmas: Producción industrial se estanca y marca su peor nivel desde febrero

La economía chilena sigue mostrando señales preocupantes. De acuerdo con el Instituto Nacional de Estadísticas (INE), el Índice de Producción Industrial (IPI) prácticamente se estancó en julio, con un exiguo crecimiento de apenas 1%, su peor resultado desde febrero, cuando la actividad llegó a caer 3,7%.

Este débil desempeño refleja un escenario cada vez más frágil para la industria, que pese a algunos repuntes puntuales en manufactura y energía, no logra despejar las dudas sobre la solidez de la recuperación.

Caída en minería golpea al sector

La mayor preocupación proviene de la minería, donde el índice retrocedió 0,9%, arrastrado por bajas en todos sus componentes. La minería metálica lideró el desplome, restando por sí sola 0,753 puntos porcentuales al total. La contracción del sector más relevante de la economía deja en evidencia la dependencia estructural del país y la dificultad para compensar sus retrocesos con otras áreas.

Débil sostén en manufactura y energía

Si bien la producción manufacturera avanzó 2,7% en doce meses, apoyada en el aumento de alimentos (3,5%), se trata de un crecimiento acotado y que difícilmente compensará las pérdidas mineras. Algo similar ocurre en el Índice de Producción de Electricidad, Gas y Agua (IPEGA), que subió 0,9%, sostenido principalmente por el gas (6,9%). No obstante, este resultado se percibe más como un alivio transitorio que como un motor real de dinamismo.

Comercio resiste, pero con sombras

El único dato positivo vino del comercio, con un incremento de 6,5%, explicado por mayores ventas mayoristas, minoristas y automotoras. Sin embargo, los analistas advierten que este repunte se apoya en consumo por internet y ventas de maquinaria, factores que podrían mostrar volatilidad en los próximos meses. Incluso el Índice de Ventas de Supermercados (ISUP), pese a crecer 2,8% en doce meses, mostró una caída de 0,3% respecto a junio en su serie desestacionalizada.

Un panorama poco alentador

El balance general deja en claro que, mientras el comercio ofrece un respiro, la industria y la minería vuelven a caer en números rojos, arrastrando las expectativas sobre el Imacec de julio que el Banco Central publicará la próxima semana.

La desaceleración industrial y la fragilidad del sector minero se suman a un contexto de alto desempleo e informalidad, generando un panorama que refuerza la percepción de estancamiento económico y aumentando las dudas sobre la capacidad de recuperación sostenida de la economía chilena en lo que resta del año.